Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
El Presidente hace todos los días un gran esfuerzo por colocarse a la cabeza de los peores mandatarios del mundo, a pesar de haberse promocionado él mismo como el mejor Presidente, distinción que nadie, con dos dedos de frente, le creyó, salvo sus incondicionales charios que, como sabemos, mueren en el delirio cada vez que escuchan el triple de su voz y sus palabras finas: ¡Ya chole!, por ejemplo.
A principios del año pasado, ocupó una conferencia tempranera para informar a sus adversarios que una empresa que hace encuestas a nivel mundial sobre el desempeño de los Presidentes, consideró que ’el de Tepetitán, ya saben quién, está en primer lugar en aprobación’.
Efectivamente, la empresa Morning Consult hizo una evaluación entre 13 países, incluido México. Pero contraria a la manía de nuestro Presidente de mentir, lo ubicó el segundo y calificó en primer lugar al primer ministro de la India, Narendra Modi. Del mexicano opinó que merecía ese puesto con claras tendencias a la baja. Además, para conocimiento de nuestros lectores, los datos recopilados se realizaron del 2 al 8 de marzo. ¿Son suficientes para evaluar la actuación de un mandatario?
Es decir, bastaron seis días para considerar que el nuestro ocupaba el segundo puesto en esa curiosa contienda y aun así, seis días bastaron también para considerarlo con una tendencia clara a la baja.
¿Por qué entonces no ha emitido otro juicio para continuar insistiendo en que sigue en ese puesto o mejor aún, que ya logró rebasar al indio, quien ya ha sido designado igualmente en el mismo primer lugar?
Pues el gusto no le duró mucho. Aunque en otras ocasiones se ufanó de su liderazgo mundial, para éxtasis de sus seguidores.
Además, lo que no tuvo paralelo fue la propuesta hecha por la diputada de Morena, Patricia Armendáriz, quizá en un momento de alucinación por desquicio: Proponerlo como candidato al premio Nobel de la Paz.
¡Imagínense! A un Presidente con más de 130 mil muertos a manos de los criminales. A un mandatario que permite abiertamente el acoso, el crecimiento indiscriminado de los delincuentes.
A un hombre que utiliza los micrófonos de su investidura para azuzar en contra de periodistas. Con varios despedidos de sus fuentes de trabajo a petición suya. Con un repetido discurso en contra de quienes no comulgan con sus ideas. Con un prurito inmarcesible de destrozar al país con sus ocurrencias diarias. Con un deseo infinito de destruir la naturaleza a causa de sus obras faraónicas en el sureste.
¿De dónde le vendría semejante reconocimiento como merecedor del Premio Nobel? Por lo visto, la flamante inteligencia de la señora diputada no le dio para evitar semejante ridículo. Dijo además que muchos países apoyaban semejante locura. Deben haber sido, seguramente, Bolivia, Venezuela y Cuba. Se lamentó también que aquí, muchos mexicanos consideraron la propuesta, un atropello a la inteligencia. ¿Le habrán pedido el favor a ver si pegaba? Es muy posible.
Lejos de merecer el Premio Nobel de la Paz, ganó otro: el de ’El tirano del año 2022’, en el concurso anual de Tyrant of the Year, del Reino Unido. Destacó un medio: ’Si bien la competencia fue dura, un líder se adelantó, de hecho, por una milla. Nuestro tirano del año para 2022 es Andrés Manuel López Obrador de México’.
También resalta que México es el país en donde, el año pasado, hubo más periodistas asesinados que en cualquiera otro. ’También es el país catalogado como el lugar más peligroso para ser defensor ambiental, de acuerdo con Global Witness empresa que lucha para romper el círculo vicioso de pobreza, conflictos, corrupción y violación de los derechos, entre otros temas.
Se habló del número de secuestros, agresiones, detenciones bajo su supervisión. El oficial de políticas y campañas de Index, Nik Williams, quien nominó a Obrador para el premio, dijo: ’La gran cantidad de votos para Obrador es testimonio de las amenazas estructurales a la libertad de expresión en México, que lo han convertido en el lugar más peligroso del mundo para los periodistas, fuera de una zona de guerra’, expone la AC en su comunicado.
En fin. Se dio lo que sabemos y lo que muchos aún justifican y aplauden.
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